Los mercados de abastos han sido una parte esencial de la historia del consumo en todo el mundo. Tradicionalmente, han sido el lugar donde consumidores y productores se encontraban para intercambiar bienes. Hoy en día, a pesar de la creciente competencia de las tiendas por departamentos y los malls, los mercados de abastos continúan manteniendo una participación importante en el mercado peruano.
En Perú, los mercados de abastos ocupan una posición destacada, liderando con un impresionante 80% de participación en las ventas a nivel nacional. Este hecho no solo destaca su relevancia económica, sino también su papel fundamental en la vida cotidiana de millones de ciudadanos.
Con más de 2,600 mercados distribuidos por todo el país, estos espacios no solo funcionan como puntos de venta, sino también como motores económicos vitales. Además de generar empleo para miles de peruanos y peruanas, contribuyen significativamente a la estabilidad financiera de muchas comunidades.
Estos mercados son destinos indispensables para quienes buscan productos frescos y variados, como frutas, verduras, abarrotes y carnes. La confianza y preferencia del público en la calidad y diversidad de los productos disponibles en estos espacios es evidente. Entre los mercados más representativos están el Mercado Ciudad de Dios en SJM, el Mercado Cooperativo Santa Rosa en Chorrillos, Micaela Bastidas en VMT y el Mercado Real Plaza en Ate. No solo destacan por el volumen de sus ventas, sino también por la amplia gama de opciones y servicios que brindan a los consumidores, según la Federación de Trabajadores de Mercados del Perú (FENATM).
La preferencia del público es el resultado del esfuerzo conjunto de los socios y comerciantes, quienes trabajan incansablemente para mantener la calidad y la eficiencia en el servicio. El Secretario General de la FENATM, Edwin Cullanco, destaca que estos mercados han logrado consolidarse como líderes en ventas gracias a su compromiso con la excelencia.
Con el liderazgo de Edwin Cullanco, se espera que los mercados de abastos en Perú logren una mayor participación en el mercado, mejorando tanto la calidad del servicio como el volumen de ventas, consolidando su papel en el comercio peruano.
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